Es un procedimiento quirúrgico donde se destruye o elimina parcialmente la matriz de la uña (la parte que genera la uña) para evitar que vuelva a crecer, generalmente en casos de uña encarnada crónica.

Es un procedimiento quirúrgico donde se destruye o elimina parcialmente la matriz de la uña (la parte que genera la uña) para evitar que vuelva a crecer, generalmente en casos de uña encarnada crónica.